Alimentación Adecuada Para La Mujer

Si todos los días tenemos que  elegir  nuestros alimentos lo mejor sera conocer un poco mas de ellos...y saber como aplicarlos...

   Existen diferentes tipos de dietas y frecuentemente las mujeres se preguntan cual es la  mejor para ella y su familia. Yo puedo decirles con propiedad que las dietas deben de ser preparadas a manera que respondan a las necesidades de cada persona  tomando en cuenta  la edad, las actividades que realiza, las enfermedades que padece etc. de manera que el aporte energético de un pre adolescente no sera el mismo de una señora de 75 años, las porciones cambian, el aporte calorico también, el requerimiento de vitaminas y minerales es diferente, por lo que una especialista en el campo de la nutrición es vital cuando se pretende preparar una dieta especifica.

Como podrán constatar en la imagen, ya no existe una estructura piramidal como antes, donde se ubicaban alimentos menos y mas importantes, ahora existe una figura circular en donde todos son importantes, pero difieren en la cantidad que se debe consumir.

Como ginecóloga me interesa la salud de la mujer desde una perspectiva integral,  el cuerpo humano y sus diferente sistemas actúan en conjunto no en forma separada, si una mujer goza de buena salud física deberá tener armonía en su sistema sanguíneo, intestinal, hepático, si padece de una condición como hipertensión arterial, diabetes entre otras, deberá esforzarse para mantenerse controlada y el resto de su organismo en las mejores condiciones posible, de ahí la importancia de conocer los alimentos, sus combinaciones, frecuencia de ingesta, y que tipos están permitidos y cuales no.

• Las Mujeres que son sobrevivientes de cáncer o las que están en tratamientos de quimioterapia les recomiendo ser vegetarianas, para ellas les escribiré una dieta en particular en un futuro.
• Mujeres con padecimiento de ulceras varicosas, heridas que no cicatrizan, fracturas expuestas, acné o procesos infecciosos en la piel o en los tejidos requieren de dietas alcalinizantes, es decir dietas que hagan menos ácido al organismo. 
• Aquellas que presentan infecciones vaginales a repetición necesitan dietas que no contengan  azucares, harinas refinadas de pastelería, pan blanco, alimentos fermentados.
• La hipertensión arterial necesita una alimentación baja en sodio, es decir en sal.
• La diabetes mellitus una alimentación baja en azucares y almidones aquí la fruta debe ser medida en porciones adecuadas.
• Afecciones bronquiales, asma sinusitis, eliminar productos lácteos y preservan-tes en los alimentos.
• Las mujeres embarazadas sus requerimientos nutricionales sufren una gran demanda por lo que deben aumentar no su ingesta sino su calidad de alimentación.
• Las mujeres mayores tienden a disminuir la actividad física y a ingerir menor cantidad de alimentos, estos deben de ser cuidadosamente seleccionados, pues con la madurez  se produce una perdida de la masa corporal, en algunos casos perdida del porcentaje de grasa y en otros aumento del porcentaje de grasa por lo que ciertos tipos de alimentos y suplementos son esenciales.
• Las mujeres con obesidad, con tendencia a engordar y con deseo de comer frecuentemente no importando la edad, deben saber que hay alimentos permitidos que pueden comerlos en las cantidades y en la frecuencia que deseen y aprender a racionar los otros.
• En el periodo de la menopausia existen alimentos que causan equilibrio al organismo y otros que lo desequilibran, por lo que deben escogerse bajo en azucares refinadas, altos en fibra  las carnes de pollo y huevos deberán ser de preferencia de crianza natural, aumentar el aporte de soya y disminuir los productos lácteos. 
• El Agua en todos los periodos de la vida es de vital importancia, esta no se sustituye por te, sodas, refrescos, sopas u otro tipo de bebidas, es decir, aparte de esos  líquidos,  deberá ingerir  de 1.5 a 2 litros, pero dependerá de la actividad física  y la masa corporal de cada persona.

“Que tu alimento sea tu medicina y que tu medicina sea tu alimento.”

                                          Hipócrates.